2 DE AGOSTO
– MIERCOLES –
17 –
SEMANA DE T.O. – A
Ntra. Señora de los Ángeles de la
Porciúncula
Lectura del libro del Éxodo
(34,29-35):
Cuando Moisés
bajó del monte Sinaí con las dos tablas de la alianza en la mano, no sabía que
tenía radiante la piel de la cara, de haber hablado con el Señor. Pero Aarón y
todos los israelitas vieron a Moisés con la piel de la cara radiante y no se
atrevieron a acercarse a él.
Cuando Moisés los llamó, se acercaron
Aarón y los jefes de la comunidad, y Moisés les habló. Después se acercaron
todos los israelitas, y Moisés les comunicó las órdenes que el Señor le había
dado en el monte Sinaí. Y, cuando terminó de hablar con ellos, se echó un velo
por la cara.
Cuando entraba a la presencia del Señor
para hablar con él, se quitaba el velo hasta la salida.Cuando salía, comunicaba
a los israelitas lo que le habían mandado. Los israelitas veían la piel de su
cara radiante, y Moisés se volvía a echar el velo por la cara, hasta que volvía
a hablar con Dios.
Palabra de Dios
Salmo: 98
R/. Santo eres, Señor, Dios
nuestro
Ensalzad al
Señor, Dios nuestro,
postraos ante el estrado de sus pies:
Él es santo. R/.
Moisés y Aarón
con sus sacerdotes,
Samuel con los que invocan su nombre,
invocaban al Señor,
y él respondía. R/.
Dios les
hablaba
desde la columna de nube;
oyeron sus mandatos
y la ley que les dio. R/.
Ensalzad al
Señor, Dios nuestro;
postraos ante su monte santo:
Santo es el Señor, nuestro Dios. R/.
Lectura
del santo evangelio según san Mateo (13,44-46):
En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente:
«El reino de los cielos se parece a un
tesoro escondido en el campo: el que lo encuentra lo vuelve a esconder y, lleno
de alegría, va a vender todo lo que tiene y compra el campo.
El reino de los cielos se parece también
a un comerciante en perlas finas que, al encontrar una de gran valor, se va a
vender todo lo que tiene y la compra.»
Palabra del Señor
1. Lo
central que interesa, en estas dos parábolas, es la enseñanza capital que se
repite en ambas. Tal enseñanza, en principio, es clara: el Reino de Dios es tan
importante en la vida que quien lo descubre es tanto lo que encuentra que lo
lógico es que "venda todo lo que tiene", y, en lugar de cualquier
fortuna (por muy grande que sea), se quede con el inmenso tesoro del
Reino. Porque el Reino está por encima de cualquier riqueza.
2. Sería un error
deducir, de estas dos breves parábolas, que en ellas se nos presenta el Reino
de Dios como un tesoro superior a cualquier otro tesoro; como una perla
más valiosa que todas las demás perlas del mundo. En otras palabras, el Reino
de Dios no es una riqueza más grande que cualquier otra riqueza.
Si interpretamos así estas parábolas, no
salimos del terreno de los intereses materiales o de los valores de la economía
en cualquiera de sus formas.
Jesús no vino a enseñar que, por mucha riqueza
que tengamos, no nos contentemos con ella, sino que busquemos siempre otra
riqueza más abundante. De ser eso lo que quería Jesús, lo que
haríamos sería hundirnos más en la idolatría del "dios-dinero", que
es incompatible con el "Dios-Padre" del que nos habló el mismo Jesús
(Mt 6, 19-24).
0 sea, Jesús entraría en contradicción
consigo mismo.
3. No. Jesús no vino a
adiestrarnos en la codicia de las riquezas. Todo lo contrario. Lo
que Jesús nos viene a decir, mediante estas parábolas, es que, por muy grande
que sea nuestra riqueza, hay cosas que valen más que todo el dinero del
mundo.
La gran deformación, la más brutal
perversión, que la cultura del capitalismo ha hecho con todos nosotros, es
meternos en la cabeza y en nuestros sentimientos más hondos, que lo más
importante en la vida es la riqueza, el dinero, el valor del dinero, la
estabilidad económica, etc.
Por supuesto, decir esto hoy, a quienes
sufren las peores consecuencias de la crisis económica, es una auténtica
agresión. Pero es una agresión porque todos dependemos del
dinero. No le damos más importancia a nuestra propia humanidad, a
nuestra seguridad en los demás, a nuestra dignidad, a la estabilidad que nos
tendría que dar la seguridad de que contamos con los otros, no que los otros
son unos competidores, una amenaza.
- ¿Qué esto es una "utopía"?
Por supuesto, es la utopía del Reino que
anunció Jesús.
Ntra. Señora de los Ángeles de la
Porciúncula
Historia de la Porciúncula
A 5 km de Asís,
Italia, en el valle, se encuentra Santa María de los Ángeles, hermosa basílica
construida sobre LA PORCIUNCULA
La pequeña capilla de
la Porciúncula fue donde San Francisco fundó la Orden de los Frailes Menores en
el 1209, confiándola a la protección de la Virgen Madre de Cristo, a quien le
ha sido dedicada la iglesia.
Recibió de los
Benedictinos la capilla para hacerlos centro de su comunidad.
Aquí vivió San
Francisco con sus primeros hermanos.
El 28 de marzo de 1211
Clara de Favarone de Offreduccio, recibió aquí el hábito religioso de manos de
San Francisco, dando inicio a la Orden de las Damas Pobres (Clarisas).
En el 1216, en una
visión, Francisco obtuvo de mismo Jesús la indulgencia conocida como "la
indulgencia de al Porciúncula" o "el Perdón de Asís", la cual
fue aprobada por el papa Honorio III.
Aquí san Francisco
reunía cada año a sus frailes en los capítulos (reuniones generales).
Aquí murió san Francisco.
Entre las reliquias que
se encuentran en Santa María de los Angeles:
- el cordón de San Francisco,
-la estatua del santo con las palomas que siempre allí anidan,
-las rosas sin espinas fruto del milagro cuando el santo se tiró sobre
ellas para rechazar una tentación,
- la capilla de las lágrimas donde San Francisco rezaba por la Pasión de
Cristo y por los pecadores...
Santa María de los
Ángeles, Nuestra Señora de los Ángeles bajada temporalmente del techo de la
basílica por daño del terremoto, Peregrinación SCTJM, 1998
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