16 DE MAYO – SÁBADO –
5ª - SEMANA DE PASCUA – A –
San Simón Stock
Lectura del libro de los
Hechos de los apóstoles (16,1-10):
En
aquellos días, Pablo llegó a Derbe y luego a Listra. Había allí un discípulo
que se llamaba Timoteo, hijo de una judía creyente, pero de padre griego. Los
hermanos de Listra y de Iconio daban buenos informes de él. Pablo quiso que
fuera con él y, puesto que todos sabían que su padre era griego, por
consideración a los judíos de la región, lo tomó y lo hizo circuncidar.
Al
pasar por las ciudades, comunicaban las decisiones de los apóstoles y
presbíteros de Jerusalén, para que las observasen. Las iglesias se robustecían
en la fe y crecían en número de día en día.
Atravesaron
Frigia y la región de Galacia, al haberles impedido el Espíritu Santo anunciar
la palabra en Asia. Al llegar cerca de Misia, intentaron entrar en Bitinia,
pero el Espíritu de Jesús no se lo consintió. Entonces dejaron Misia a un lado
y bajaron a Tróade.
Aquella
noche Pablo tuvo una visión: se le apareció un macedonio, de pie, que le
rogaba: «Pasa a Macedonia y ayúdanos».
Apenas
tuvo la visión, inmediatamente tratamos de salir para Macedonia, seguros de que
Dios nos llamaba a predicarles el Evangelio.
Palabra
de Dios
Salmo:
99,1-2.3-5
R/.
Aclama al Señor, tierra entera
Aclama
al Señor, tierra entera,
servid al Señor con alegría,
entrad en su presencia con
vítores. R/.
Sabed que
el Señor es Dios:
que él nos hizo y somos
suyos,
su pueblo y ovejas de su
rebaño. R/.
El
Señor es bueno,
su misericordia es eterna,
su fidelidad por todas las
edades. R/.
Lectura
del santo evangelio según san Juan (15,18-21):
En
aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Si el mundo os odia, sabed
que me ha odiado a mí antes que a vosotros.
Si
fuerais del mundo, el mundo os amaría como cosa suya, pero como no sois del
mundo, sino que yo os he escogido sacándoos del mundo, por eso el mundo os
odia.
Recordad
lo que os dije:
“No
es el siervo más que su amo”.
Si a
mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi
palabra, también guardarán la vuestra.
Y
todo eso lo harán con vosotros a causa de mi nombre, porque no conocen al que me
envió».
Palabra
del Señor
1.
Si, efectivamente, los seguidores de Jesús se quieren y viven como Jesús quiso,
eso tuvo que suponer una innovación que pronto se vio como amenaza y peligro
para el "sistema" o el "orden establecido". Por eso Jesús
les anuncia el "odio del mundo". La palabra "mundo"
traduce el término griego kósmos, que remite, no solo a la idea de
"totalidad", sino también a lo que es el "sistema", la
"institución" y, finalmente, el "ornato" o adorno que usan
las personas.
2.
¿Por qué el "orden establecido" odió a Jesús y odia a quienes le
siguen?
Porque
el sistema del orden presente se basa en el "interés" (económico,
político...), que controla y domina la libertad. Por el contrario, el proyecto
de Jesús se basa en relaciones de amor y libertad, que, al poner sus
preferencias en los últimos, entran en conflicto con los intereses de poder, de
acumulación, que generan
tanta exclusión y tanta violencia. El amor entre personas, que optan por los
más desgraciados, puede ser una seria amenaza para los intereses del
poder.
3.
Jesús ejerce una soberanía, sobre quienes le siguen, que inevitablemente es un
peligro para el "orden" de este mundo. Además, cuando hablamos del
"orden de este mundo", nos referimos, por supuesto, al ordenamiento
político y económico. Pero no solo eso. La soberanía de Jesús, al ser la
soberanía sobre pobres y excluidos, es también un peligro y una amenaza para
el
ordenamiento religioso.
Todo
poder, también el religioso, se siente mal cuando percibe que la fuerza del
amor, que plantea el Evangelio, cobra vigor y va en serio, con todas sus
consecuencias.
Nace
en el condado de Kent (Inglaterra) en el año 1165. Su apellido Stock hace
alusión a un "hueco de tronco" donde de pequeño y de joven, Simón
pasaba largas horas en oración como un ermitaño.
Cuando
llega el primer carmelita a Inglaterra ingresa a la Orden. Lleva allí una vida
ejemplar y piadosa.
En
un capítulo general reunido en Aylesford fue nombrado general de la Orden del
Carmelo. Desempeñará este servicio hasta su muerte.
Era
muy devoto de la Virgen María, por lo que se le ha llamado "el amado de
María". A Ella le componía himnos, que luego recitaba.
Rezaba
así San Simón Stock cada día pidiendo por su Orden:
Flor
del Carmelo Viña floridal esplendor del cielo; Virgen fecunda y singular; oh
Madre dulce de varón no conocida; a los carmelitas, proteja tu nombre, estrella
del mar.
Una
de sus mayores preocupaciones era la difusión de los carmelitas en Inglaterra y
toda Europa; por ello funda diversos conventos en las principales ciudades
universitarias como por ejemplo Oxford (Inglaterra), Cambridge (Inglaterra),
Boloña (Italia) y París (Francia).
A él
se le aparece el 16 de julio de 1251 la Virgen (en ese entonces Superior de la
Orden del Carmen) y le entrega un escapulario mientras le dice: "Toma este
hábito, el que muera con él no padecerá el fuego eterno". Llevar el
escapulario constituye una promesa de morir en gracia y salir del purgatorio lo
antes posible (a más tardar el sábado siguiente a la muerte). No es un amuleto
o protector mágico sino es un compromiso a vivir en forma mariana o sea
imitando las virtudes de la Santísima Virgen. Esta devoción se divulgó
rápidamente.
Muere
en Burdeos (Francia) el 16 de mayo de 1265, haciendo una visita pastoral. Es
enterrado allí. En el año 1951 es trasladado a Aylesford.
Aunque
es venerado por los Carmelitas desde por lo menos 1564 nunca ha sido
oficialmente canonizado, aunque el Vaticano aprueba que los carmelitas celebren
esta fiesta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario